La nutrición clínica está destinada no sólo a la prevención de enfermedades sino al tratamiento de patologías que puedan ser mejoradas, controladas o en ocasiones, corregidas mediante la alimentación saludable.
Algunas de las enfermedades que se pueden tratar desde la nutrición clínica son:
- La hipercolesterolemia (aumento de colesterol en sangre)
- La hipertrigliceridemia (aumento de triglicéridos en sangre)
- Anemia ferropénica (déficit de hierro en sangre)
- Hiperuricémia (ácido úrico elevado en sangre)
- Diarreas
- Flatulencias
- Digestiones pesadas
- Intolerancias o alergias alimenticias
- SIBO
- Patologías renales
- Hígado graso
- Hipertensión arterial
- Diabetes mellitus I y II
- Trastornos de la alimentación
- Hipotiroidismo e hipertiroidismo
- Obesidad y delgadez asténica
- Debilidad
- Etc.
Mediante una valoración inicial y tras un estudio detallado de las analíticas y pruebas que aportes, se elaborará un plan nutricional personalizado destinado a mejorar los síntomas, a reducir los valores alterados en las analíticas, a reducir los problemas de salud y en definitiva a que tengas una vida más equilibrada mejorando el bienestar y la salud.
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